Riesgos y Complicaciones tras Aumento de PechosExisten posibles complicaciones derivadas de la anestesia y de la intervención propiamente dicha, como infección, sangrado, hematoma, alteraciones de la cicatrización y posibles complicaciones derivadas de la colocación del implante mamario como rotura, contractura capsular.

Contractura Capsular

Cuando una prótesis mamaria (o cualquier cuerpo extraño) se introduce en el organismo, como respuesta natural crea una reacción cicatricial alrededor del mismo, llamada cápsula. La contractura capsular, es una posible complicación que puede suceder en cualquier momento. Cuando el organismo crea este tejido alrededor del implante, lo único que pretende es aislarlo, disminuyendo posibles reacciones. En determinados casos, sin saber exactamente la causa, esta cápsula comprime el implante, creando deformidad y molestias. Es importante recordar que no es el implante el que se ha endurecido, sino que la cápsula se ha contraído.

No están muy claros los motivos que provocan la contractura capsular. A continuación se indican los de mayor riesgo:

  • Posible contaminación bacteriana, que puede ocasionar una reacción inflamatoria que conducirá a la contractura de la cápsula.
  • Emplazamiento subglandular. Los implantes situados encima del músculo tienen a un mayor riesgo de contractura capsular, no así los submusculares.
  • Implantes de superficie lisa. Diversos estudios demuestran mayor incidencia de contractura capsular con los implantes lisos.
  • Infección. La contractura capsular parece más probable tras una infección.
  • Seroma. Si se ha producido seroma, puede haber mayor riesgo de contractura.
  • Hematoma. Los hematomas causan una reacción inflamatoria que puede llevar a la contractura capsular.
  • El tabaco. Fumar disminuye los niveles de oxígeno en sangre, lo que puede suponer una demora en la curación y posiblemente una reacción inflamatoria.

Existen distintos grados de contractura (Baker) que se clasifican de la siguiente forma.

  • Grado I. El pecho es normalmente suave y parece natural. La contractura es imperceptible.
  • Grado II. El pecho está un poco duro pero su apariencia es natural.
  • Grado III. El pecho está duro y su forma comienza a verse deformada.
  • Grado IV. El pecho está duro y completamente deformado. Algo de dolor puede asociarse a este grado de contractura.

Hematoma

Un hematoma es una acumulación de sangre. A veces se resuelve espontáneamente, pero en ocasiones es necesario drenarlo. Para disminuir las posibilidades de hematoma tras un aumento de pechos, no tome aspirina o anticoagulantes al menos dos semanas antes de su intervención.

Infección

Como en cualquier cirugía, puede producirse infección. Generalmente las infecciones aparecen a los pocos días de la intervención, aunque pueden hacerse notar en cualquier momento. Lo síntomas típicos son: fiebre, inflamación. La mayoría podrá tratarse con antibióticos, aunque si no respondiera habría que retirar la prótesis mamaria hasta resolver la infección.

Seroma

Es una acumulación de fluido alrededor de la prótesis mamaria que podrá o no ser preciso extraer. El cuerpo absorbe el seroma y los pequeños hematomas, pero en caso de ser considerables se hace necesario el drenaje para la curación.

Rotura del Implante y Fuga de Gel

Los fabricantes de implantes mamarios coinciden en que no son para toda la vida. La rotura de una prótesis de mama puede producirse como consecuencia de un fuerte traumatismo o desgaste de la superficie del implante por el paso de los años. En el caso de que se rompa un implante mamario de gel de silicona, ésta queda contenida por la cápsula que la rodea; en la actualidad con el uso de gel de silicona cohesivo las probabilidades de que ésta migre son mínimas. Estudios recientes indican que no existe ningún efecto adverso sobre el organismo producido por la silicona.

En ocasiones la rotura del implante puede pasar desapercibida, pero generalmente se observa una disminución del tamaño de la mama y alteración de la forma, que puede acompañarse de dolor o molestias inespecíficas.

Para realizar el diagnóstico de rotura del implante es necesario la realización de pruebas complementarias como ecografía, mamografía o resonancia magnética.

El riesgo de producirse la rotura aumenta a medida que pasan los años desde la intervención, existen estudios que demuestran que el riesgo aumenta a partir del décimo año. Los implantes actualespresentan una cubierta más gruesa y están compuestos de gel cohesivo para reducir la posibilidad de roturas.

Difusión del Gel

El componente líquido de la silicona puede difundir a través de la cubierta del implante en ausencia de rotura, siendo absorbido en su mayoría por la cápsula que le rodea o ser captado por los macrófagos (células fagocíticas) del sistema inmunitario del organismo que se encargan de destruirla.

Resulta complicado determinar la cantidad de líquido que se difunde ya que las partículas son microscópicas para ser detectadas por ecografía, mamografía, scanner o resonancia magnética.

El desarrollo en el diseño y las características tecnológicas de los implantes ha mejorado sustancialmente en los últimos años, estando recubiertos por múltiples capas que minimizan casi por completo los riegos de difusión (más información).

Granulomas

En el caso de que se produzcan fugas de silicona debido a la rotura del implante, se forman una especie de bultitos en la mama que se denominan granulomas. No son malignos pero en ocasiones es complicado diferenciarlos de un tumor de mama, incluso puede ser necesario la realización de biopsias para diagnóstico definitivo.

Cambios en la Sensibilidad

Cualquier intervención quirúrgica en el pecho, incluso una biopsia, puede significar que la mama y/o el pezón tenga cambios en la sensibilidad. Estos cambios pueden ser más o menos intensos y habitualmente son temporales, aunque hay casos en que son permanentes.

Tras un aumento de pecho, la mayoría de mujeres experimentarán alguna molestia postoperatoria. Recuperar la sensación normal en el pezón puede llevar algunas semanas. Durante el proceso de curación se puede notar entumecimiento o elevada sensibilidad.

Es importante recordar que puede transcurrir un año o incluso dos para recuperar la normal sensibilidad, aunque la mayoría lo hace mucho antes.

Bottoming Out

El Bottoming Out significa que la prótesis ha descendido de su posición, desplazando el surco submamario hacia abajo y haciendo que el pezón esté demasiado elevado con relación al cono mamario.

Generalmente se ve en pacientes con poco tejido mamario y poca cobertura de piel. Es más frecuente con implantes colocados sobre el músculo y menos cuando van situados debajo el músculo. El tipo de implante utilizado no tiene nada que ver con el bottoming out.

Puede ser debido a una excesiva disección del bolsillo que alberga a la prótesis, o bien al peso del implante. Si esto ocurre, será necesario colocar el implante a la altura adecuada.

Enfermedades Autoinmunes y del Tejido Conectivo

El sistema inmunológico ayuda al organismo a reconocer y luchar contra la infección y los organismos extraños; ocasionalmente nuestro cuerpo crea los llamados autoanticuerpos, esto es, anticuerpos contra nuestros propios tejidos como si de organismos extraños se trataran.

Existe un grupo de enfermedades llamadas enfermedades autoinmunes en las cuales el organismo se comporta de esta manera ej. Lupus eritematoso, artritis reumatoide y esclerodermia. Muchos estudios han tratado de establecer alguna relación entre los implantes de silicona y estas enfermedades autoinmunes sin hallar ninguna evidencia al respecto.

Cáncer de Mama

No existe evidencia médica hasta la fecha que pruebe que mujeres con implantes mamarios de silicona presenten una mayor probabilidad de padecer cáncer, incluido cáncer de mama. Ningún estudio ha establecido relación alguna entre los implantes mamarios de silicona y el cáncer de mama.

Toda mujer con implantes de mama debe realizar el mismo protocolo de detección precoz del cáncer de mama que el resto.

Embarazo y Lactancia

No existe evidencia médica alguna que demuestre que los implantes mamarios interfieran con la lactancia. Sin embargo, en la medida que la cirugía afecte en la función o sensibilidad del pezón, la lactancia puede alterarse.