Posiblemente la Abdominoplastia sea la intervención de Cirugía Estética con un postoperatorio más duro desde el punto de vista físico especialmente cuando va asociado a la corrección de una diástasis de rectos (plicatura de rectos) y de una liposucción complementaria.
Contar con la colaboración de nuestra fisioterapeuta, Saioa, será de una gran ayuda en ese periodo y sin duda constituye un gran valor añadido.
Te recomendaremos el inicio de los drenajes linfáticos (técnica de masaje para activar el funcionamiento del sistema linfático superficial para mejorar la eliminación de líquido intersticial, facilitando su evacuación), al 3er día, lo cual ayudará a drenar la inflamación y favorecerá la cicatrización. Al ser una técnica muy suave lo tolerarás perfectamente.
Es importante que realices respiraciones profundas costales y abdominales suaves a tolerancia, durante el tratamiento. Te recomendamos que igualmente realices ejercicios respiratorios 2 a 3 veces al día, unas 10 repeticiones, para promover el movimiento del músculo diafragma y mantener activo el sistema linfático.
Deberás practicar caminatas suave y cortas la primera semana para activar la movilización del flujo sanguíneo, con precaución de las heridas. Tu postura tenderá a ser antiálgica al principio por el dolor, ligeramente encorvada hacia delante para paulatinamente irse corrigiendo.
La postura en la cama durante la primera semana será acostado boca arriba, con el tronco en semi flexión reclinado con almohadas aproximadamente a 20 grados, y con las rodillas en semi flexión de 20 a 30 grados, colocándose almohadas debajo de las rodillas, para reducir la tensión en las heridas.
Es importante que realices también ejercicios suaves de movilización de tobillos para mejorar la circulación de las piernas y del líquido inflamatorio.
La faja deberás llevarla puesta el mayor tiempo posible y podrás retirarla para tu aseo diario, el cuidado de la herida y para realizar las sesiones de drenaje linfático.
Observa si durante el uso de la faja, se genera algún pliegue en piel o quemadura, de ser así se sugiere colocar algodón en la zona. En ocasiones, según como sea la faja, se pueden hacer pliegues en el centro del abdomen, se recomienda evitar que esto ocurra manteniendo una posición erguida, colocando una toalla para aplanar la piel entre la piel y la faja o habla con nosotros para que te facilitemos accesorios que lo impidan.
Transcurridos 15 días, se puede iniciar en conjunto con el drenaje linfático la movilización suave de piel abdominal para prevenir adherencias y acúmulos de grumos en la piel. Iniciaremos también la promoción de ejercicios respiratorios, movilizando las costillas y activando el diafragma.
Aunque el resultado final de la cicatriz dependerá de la cicatrización individual del paciente, entre los 21 días y el mes, se iniciará la movilización de las cicatrices para prevenir la aparición de cicatrices hipertróficas o queloides. La movilización o masaje de la cicatriz ayudará también a mejorar la sensibilidad de la zona.
No es difícil que presentes dolencias de espalda debido a las actitudes antiálgicas que adoptarás. Te aconsejaremos cómo mejorarlas, tonificando la musculatura de la columna y del abdomen, así como ejercicios para tu bienestar general y para que puedas reincorporarte a tu actividad laboral y deportiva cuánto antes.
En IVANCE contamos con la colaboración inestimable de Saioa Audikana, quien además de ofrecerte servicios de drenaje linfático manual y fisioterapia, actuará como tu Coach en Salud y Bienestar para que tu experiencia con la intervención sea lo más cómoda posible y sus resultados duraderos.
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