¿Como conseguir un vientre plano?Todas ansiamos tener un vientre plano y  se puede conseguir. Con un poco de disciplina en la dieta , hacer ejercicio regularmente y cuidar la piel de la zona abdominal, mantendremos a raya los acúmulos de grasa, tonificaremos la musculatura abdominal y  prevenimos la laxitud cutánea.

Las mujeres, a lo largo de nuestra vida, pasamos por distintas etapas y en cada una de ellas las necesidades son distintas.

Una chica joven, que no ha tenido hijos, con una alimentación adecuada a base de mucha fruta, verduras y poca grasa, evitará los acúmulos de grasa abdominales. Es fundamental trabajar con ejercicio los músculos abdominales de forma regular, tonificándolos de manera que sean capaces de soportar los cambios que un posible embarazo les va a producir.

Además de practicar la clásica tabla de abdominales, es recomendable reforzar la musculatura transversa mediante la práctica de abdominales hipopresivos.

Estos ejercicios pueden realizarse también en los días sucesivos al parto y durante tres meses después ya que al contraer este músculo transverso  contribuyes a poner los órganos internos en su sitio tras el parto, reforzar el suelo pélvico, reducir la cintura y evitar los problemas de incontinencia urinaria que pueden darse a veces tras dar a luz.

Pero en mujeres que han pasado por uno o varios embarazos, y sin una tonicidad muscular previa adecuada,  la “tripita” se debe en general a que los músculos del abdomen se han separado y son incapaces de sostener el contenido visceral que la presión intrabdominal desplaza hacia fuera. Por mucho ejercicio que hagamos esas fibras musculares no se van a recuperar y la única manera de tensarlos es mediante cirugía del abdomen, lo que llamamos plicatura de rectos. A través una incisión corta en el pubis se suturan los músculos, se tensan , y se aprovecha para retirar algo de piel y dejar el abdomen más plano.

Con los años y en muchos casos a pesar de llevar una dieta estricta y realizar ejercicio de forma regular, nuestro cuerpo va cambiando. Generalmente debido a los estrógenos se va acumulando grasa alrededor de las caderas y en el abdomen, la piel pierde su elasticidad y vamos adquiriendo un aspecto “redondo”. Aquí solamente nos queda la opción de la cirugía: una abdominoplastia asociada o no a liposucción que elimine esa grasa resistente y permita tensar esa piel flácida, remodelando la figura.

En resumen, se trata de prevenir mediante dieta, ejercicio, habitos saludables y una buena hidratación cutánea y así anticiparnos de alguna manera a los cambios que el paso de los años, los embarazos y las hormonas van a provocar en nuestro abdomen. Pero tendremos en consideración que cuando  todo lo anterior no ha sido suficiente, nuestra amiga la cirugía acude en nuestra ayuda.

Si te sientes aludida por alguno de estos supuestos, consúltanos o sigue leyendo en los enlaces que te ponemos a continuación.